lunes, 21 de diciembre de 2009

Afeitado perfecto y sin irritación


Millones de hombres en todo el mundo se enfrentan cada mañana al espejo, a la cotidiana tarea del afeitado. Es, probablemente, la rutina de belleza más común entre los hombres y es que, en mayor o menor medida, todos los caballeros deben someterse al proceso de afeitado.

Las opciones que se presentan.

· El afeitado con máquina eléctrica: más rápido y cómodo.

· Con cuchilla: mucho más apurado y que provoca menos irritación. Este es el que te recomiendo y el que vamos a tratar.

Para obtener un afeitado perfecto se debe seguir los siguientes pasos:

Preparación de la piel.

Lo aconsejable es afeitarse después de la ducha diaria o después de lavarse la cara; procederemos a humedecer la piel con abundante agua caliente. Para barbas muy duras es conveniente proceder a la aplicación de un paño caliente. Seguidamente aplicaremos un gel o espuma que prepara la piel con un masaje circular, dejando actuar en la cara durante unos minutos.

Todo con el debido orden.

Primero, las mejillas, los laterales de la cara y el cuello; después, el pelo que crece en la barbilla y alrededor de los labios. En éstas zonas es donde nace el pelo más duro, por lo que cuanto más tiempo estén recubiertos de gel, más se ablandarán y más preciso será el afeitado.

Afeitado.

Humedeceremos las cuchillas con agua caliente. Sujetaremos la piel con una mano, mientras con la otra pasaremos la maquinilla de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba para un acabado mejor. La utilización de una maquinilla adecuada nos facilitará esta misión para luego refrescarnos la cara con agua fría.

Lo que no sabías.

Tal vez no sabías que… A lo largo de su vida, el hombre pasa aproximadamente 780 horas (32 días y medio) afeitando los 8 metros de pelo que como media crecen en su cara.

La barba de un hombre contiene entre 7 000 y 15 000 folículos capilares, un número genéticamente determinado.

El pelo del rostro del hombre tiene aproximadamente el doble de diámetro que el pelo femenino.

La barba del hombre contiene el mismo número de cabellos que la suma de las piernas y axilas de la mujer.

El pelo crece cada día una media de 0.3 mm, lo que unos 13 centímetros al año.

El pelo de la barba cuando está seco, tiene la dureza de un alambre de cobre.

En la Edad de Piedra un buen afeitado suponía una ventaja en las luchas cuerpo a cuerpo, ya que la barba era un interesante punto de ataque para el enemigo.

Los sistemas de afeitado de la época incluían piedras afiladas, toscas pinzas fabricadas con cuernos de animales o ramas ardientes.

Según manifiestan las pinturas rupestres, el hábito de afeitarse ya era popular en la prehistoria.

En la antigüedad se usaba una crema de afeitado, una mezcla de grasa animal y ceniza de madera.

Fuente foto: mensencia.

Fuente texto: nutrición y estética Onix.